2008 un año de perturbaciones, no sólo ciclónicas

Por: Arnaldo Ramos Lauzurique (Preso de conciencia del Grupo de los 75 en la prisión Nieves Morejón de Sancti Spíritus, vice director del Instituto Cubano de Economistas Independientes, que basa sus trabajos de análisis sólo en la información oficia. Este documento tuvo que ser transcrito con lupa, por el pequeño tamaño de la letra con que pudo realizarlo para sacarlo de la prisión, ya que tiene más de 12 páginas)

I. El resultado  más general.

Hay dos noticias de fin de año, una no muy buena y otra mala. La menos mala es que el Producto Interno Bruto (PIB), a pesar de los ciclones y de la feroz represión a la Economía Informal, creció en un 4,3 %. . La mala es que la cuenta no cuadra y la gente no ve por ninguna parte ese crecimiento.

Al igual que en el 2007 se fundamenta el crecimiento a costa del difícilmente comprobable sector cubano de los servicios, donde José Luís Rodríguez informó un 8 % de crecimiento, lo cual implica necesariamente que el resto de las actividades en su conjunto es decir, el sector productivo, decreció en un 9, 4 %.

                                                      Millones de pesos                      % de incremento de  2008                                                    

                                       2000      2005     2006      2007     2008         2000   2005   2006   2007

Producto interno Bruto   30531     39169      44065     47370     49407           61,8    26,1     12,1      4,3

Servicios                          21063,5 29 432,5  33403,5  37 311,7  40297          91,3    36,9      20,6     8,0

Act

ividad  productiva.       9467,5    9736,5   10661,5  10 058,3   9110          (3,8)    (6,$)    (14,6)  (9,4)

                               

Fuentes: Revista  Bohemia ( 26. 10.  07 p 31)  y discursos de José  Luis Rodríguez  a la Asamblea Nacional del Poder Popular. Granma 29.12.07 y Juventud Rebelde  28.12.08.

Pese al fuerte decremento  de un 9,4 % en la actividad productiva José Luis Rodríguez  informó que  habían crecido sus sectores claves: el agropecuario en 1,6 %; la industria 1,2 % -crecieron 13 de sus 21 ramas-; la construcción en 3,3 %; el transporte 7,4 % y las comunicaciones 9 %. No mencionó el comercio, aunque en lo referido a la circulación  mercantil minorista, el ministro Marino Murillo informó un crecimiento del 10,5 % (Juventud Rebelde  26.12.08). Solo faltó por mencionar la actividad forestal, de poca significación cuantitativa.

Para el sector agropecuario en su conjunto, en los  siete primeros meses del año, la producción de raíces que incluye papa, malanga, yuca, boniato y otros, solo creció  en 1,2 % y la de hortalizas se redujo en 2,5 % (Tribuna de La Habana 12.10.08). Después de los  huracanes, en septiembre, la comercialización de viandas y hortalizas  disminuyó a un millón de quintales, la quinta parte del mes anterior, no solo por el efecto de éstos, sino también por las medidas represivas  a la Economía Informal (Trabajadores 06.10.08). La producción de huevos  bajó de 5 millones a 2 millones de unidades diarias después de los huracanes (Noticiero de TV 23.12.08  800 pm) y aunque se informó de crecimientos en la producción de leche y carne de cerdo, sin mencionar  números, no parece posible que ello pudiera explicar  el crecimiento de  ese sector  globalmente.

No hay elementos para evaluar  los crecimientos –algunos notables – de la industria, el transporte, las comunicaciones y la circulación mercantil minorista, salvo lo ya apuntado, acerca de que no están en línea  con el elevado decrecimiento del sector  productivo, que es del 9,4 %.

Se informó un crecimiento en las construcciones de un 3,3%, aunque en lo referente a la terminación de viviendas disminuyó un 20,2% de 52 607 en 2007 a 42 000 en 2008.

A falta de informaciones más detalladas  la principal conclusión que puede extraerse es la ya mencionada: “La cuenta no cuadra”. La segunda conclusión es que la actividad productiva no ha cesado  de decrecer desde el año 2007 y es en 2008, incluso, inferior al año 2000.

Si fueran ciertos los notables crecimientos del sector de los servicios; después de descontados el turismo internacional y los servicios profesionales en el exterior -en particular los médicos- los correspondientes a los que tienen efecto directo en la población -la salud, educación, servicios comunales, servicios funerales y otros- aunque  hubieran  crecido a un ritmo  notable -algo que la población no experimenta- no pueden cubrir el decrecimiento de bienes materiales de primera necesidad que brinda la esfera productiva.

José Luis Rodríguez  trató de adelantarse  a esas objeciones  declarando que no todos los recursos que se expresan en el PIB pueden cubrir las necesidades  acumuladas y que para ello es necesario invertir. Es decir, se sigue diciendo lo mismo de siempre, hay que sacrificar el puente por un futuro luminoso,  que no acaba de llegar. Incluso Raúl Castro  fue aún más desesperanzador y en su entrevista concedida a Talía González  el fin de año  dijo;  “…Hemos estado viviendo y tenemos que continuar viviendo en una situación tensa y difícil;…”

Huracanes aparte, que tuvieron una repercusión en la economía en 2008, hay que referirse en primer término a la situación de la Economía  Informal, que comenzó a reprimirse de forma recrudecida  desde los primeros días de mayo y que  a partir de septiembre, tras los ciclones Gusta y Ike, fue objeto de un acoso más brutal aún.

No es posible calibrar el efecto que ha tenido la persecución a la Economía Informal en 2008, sin hacer un paréntesis  sobre su significado en la Cuba actual, como uno de los puntales, tanto de la economía nacional como de la familiar y válvula de escape de las tenciones que provocan las tradicionales escaseces.

II. Un   paréntesis sobre la Economía Informal y el recrudecimiento de la represión económica.

La Economía Informal, Economía Subterránea, o Economía Ilegal, según quiera denominársele, se ha convertido en parte integrante del modo de vida nacional y con ello este medio siglo ha dejado como herencia que la inmensa mayoría de la población cubana se acostumbró a vivir más allá de los límites de la legalidad, una barrera que en cualquier sociedad  normal violan unos pocos y otros más lo hacen sólo ocasionalmente.

La violación de la Ley tiene dos causas fundamentales: una es la reglamentación excesiva, que incluso ha reconocido Raúl Castro: “Coincidimos con los que han alertado  sobre el exceso de prohibiciones y medidas legales, que  hacen más daño que beneficio,…”  “…detrás de cada prohibición incorrecta búsquese un buen número de ilegalidades.”(Debió agregar: Y también de sancionados) (Granma 29.12.07). Pero como es usual, es de lamentar que su actuación posterior no se haya ajustado a ese criterio. La otra causa de la violación de la Ley es la imposibilidad de la subsistencia para la mayoría sin estar en conflictos con la misma.

Para un sector más favorecido de la población, la violación de las normas legales permite el acceso a bienes, servicios y lujos, que en el mundo exterior son accesibles con solo disponer de los ingresos necesarios y que en Cuba requieren, además de recursos, un  cierto grado de  desobediencia, como es el acceso a emisiones extranjeras de televisión, las cuales son objeto de redadas  policiales, tanto por la posesión de antenas parabólicas como a los individuos que proporcionan éstas, así como las tarjetas de recepción satelitales, el acceso a Internet y otros muchos bienes tangibles  e intangibles. Las ediciones  del periódico Granma del 08.02.07 y 12. 05.07  han informado de distintos operativos policiales en varios lugares de la capital donde se han ocupado tarjetas de recepción  satelitales, cable coaxial, neoprín, receptores, antenas parabólicas, amplificadores, computadoras, LNB, arañas para multiplicar señales y otros accesorios; con imposición de multas de hasta 20 mil pesos, confiscación de bienes y penas de prisión. Es conocido, además, que constantemente se realizan operativos en los  barrios para retirar las antenas parabólicas   en poder de  la familias. El régimen interpreta que la reacción de señales internacionales  está en línea con “las actividades contrarrevolucionarias” de la radio y de la TV Martí.

En el orden económico, con sus alcances sociales y políticos, el principal medio de violación de las normas establecidas por el régimen es la Economía Informal, Subterránea  o Ilegal, que es a su vez una de las principales fuentes que permiten el acceso a los más variados bienes.

El régimen le da distintas denominaciones a las diferentes fuentes y manifestaciones de esta actividad, y para su penalización las tipifica como: robo, desvío de recursos, corrupción, bolsa negra, actividad económica ilícita, receptación, especulación y acaparamiento, apropiación indebida de recursos, hurto y otros.

Este fenómeno es ya consustancial a la sociedad cubana y se ha enraizado e imbricado profundamente en el entramado económico y social. El régimen trata de explicar esta situación como una herencia del pasado capitalista, producto de la acción de un pequeño sector de lumpen proletarios, delincuentes y vagos, que aliados a ciudadanos corruptos e incluso  adversarios políticos, se aprovechan de las limitaciones  económicas presentes

Esas argumentaciones  no pueden explicar, desde luego, que la inmensa mayoría de la población participe de esas actividades, ya sea como productor, suministrador, vendedor, operario e simplemente comprador o beneficiario.

Eso solo lo puede explicar la necesidad de incrementar los ingresos o acceder a bienes, que de otro modo, no les serían accesibles, pese a los riesgos que ello implica. Eso lo conocen los funcionarios del régimen -a todos los niveles- no han podido eliminarlos.

En 50 años se han producido cada cierto tiempo intentos oficiales de contener el fenómeno y mantenerlo dentro de ciertos límites, de ahí la existencia de períodos de cierta tolerancia  donde predomina el hacer la vista gorda y periodos de represión, con operaciones policiales y largas  penas de prisión incluidas.

Fuentes de la Economía Informal.

El régimen reconoce tres, que pueden fundirse en una sola, pues hay al menos ocho más de gran importancia:

1. Robo, desvió de recursos y corrupción. En  realidad  todo ello es robo, pero esa expresión se limita oficialmente a la apropiación violenta o furtiva realizada por un ciudadano común, un simple hijo de vecino; la otra denominación, el desvío de recursos, es un término edulcorado utilizado cuando se hace lo mismo, pues por un funcionario; y la corrupción es el robo  a mayor escala que realizan los dirigentes y altos funcionarios, pues siempre se deja bien claro que este último ocurre a niveles de empresa y de dirigentes  de nivel  medio porque ese mal “está ausente de los altos niveles”. En el IV Encuentro Internacional sobre la Sociedad y sus  Retos frente a la Corrupción, celebrado en La Habana, el vice fiscal general de la república Carlos Raúl Concepción Rangel dijo: “ en Cuba la corrupción se localiza principalmente en el sector empresarial y en el nivel de dirección intermedia estatal”  (Juventud Rebelde  08.01.07). En entrevista a Osiris Martínez López, de la dirección de procesos penales de la Fiscalía General República  este declaró; “… en las altas esferas  del Estado y el Gobierno  no tenemos corrupción política…” “La corrupción se da en los sectores intermedios y empresariales”. (Trabajadores 12.11.07).

Las lagunas en la información y la falta de reiteración en los en los sucesos dados a conocer,  tienen por fin que la gente olvide los casos que se  han sancionado a esos niveles -que son la parte visible del témpano- el fenómeno del narcotráfico  en 1989  en los altos niveles  del MININT, (Ministerio del Interior) el caso de Carlos Aldana, de Juan Carlos Robinson, Luis Ignacio Gómez  Gutiérrez, Luis Orlando Domínguez, Diocles Torralbas  y hasta el ya  remoto  de Efigenio  Améjeiras, son solo una muestra. Ello sin cortar con la magno-corrupción de una élite que ha dispuesto a su antojo del patrimonio  nacional, sin rendir cuentas por ello.

El robo es una de las fuentes importantes de la Economía Informal, sobre todo cuando es realizado por funcionarios del Estado, no a nivel de javitas  o sacos, sino por camiones autorizados, con hojas de ruta incluidas y está presente  de forma directa o velada en casi todas las  otras fuentes.

2.  En la agricultura, según Orlando Lugo Fonte (Juventud Rebelde 16.02.07) se pierde el 30 % de lo producido por falta de camiones, envases, etc. Es obvio, que de casi un millón de toneladas de productos que se quedan en los campos por no recogerlos el Estado, una parte importante va a engrosar las ventas de los mercados agropecuarios estatales bajo cuerda, o los de oferta y demanda, puntos de venta, bolsa negra y otras instancias. Sobre la papa la prensa comentó (Trabajadores 03.03.08):”En algunos barrios capitalinos, personas  inescrupulosas pregonan en ilícita mercancía desde mucho antes del inicio de la cosecha.”

3. Los campesinos y cooperativistas aprovechan, además, las grandes deficiencias de las entidades de acopio e incumplen sus compromisos para desviarlas al mercado, donde obtienen mejores precios. Hay que recordar, con respecto a la organización de acopios, la frase popular de que: “el que mucho abarca poco aprieta”.  Acopio, como entidad, es el principal intermediario y acaparador del país, compra a precios bajos y vende caro, amparado por su condición de instancia estatal, que le permite hacer lo que tanto critica y penaliza el régimen en los ciudadanos particulares.

Sin embargo se pretende hacer omnipotente la actividad de acopio. Machado Ventura ha declarado.  “… se impone transformar la comercialización de manera tal que se haga acopio rápido y completo de cuanto sea cosechado, con niveles de control y exigencias  que minimicen el papel de los intermediarios.”  (Granma 09.06.08).

4. Existencia de distintos sistemas de distribución y de precios. El caso más conocido y de mayor escala es el de la cuota normada. El ciudadano común puede obtener ingresos adicionales vendidos a precios de mercado, mucho mayores que los de adquisición, algunos de los artículos que recibe por esa  vía  y no consume, o no consume totalmente. Los administradores de los establecimientos que los distribuyen,  ya a mayor escala, venden a precios también de mercado, los productos que no recoge la población, también los vencidos y los sobrantes, que propicia la complicada estadística de este tipo de distribución. Un ejemplo lo ofreció el ministro de Comercio Interior  Marino Murillo, que dijo que en la Ciudad de la Habana no se compra el 17% del pan de la cuota. Ese pan vendido a $0,50  el ejemplar significa unos 68 millones  de pesos al año (Bohemia 12.09.08 p.29).

Aquí también se incluyen los diferentes niveles de precios entre los mercados agropecuarios estatales y de oferta y demanda, donde el cambio de lugar de los productos beneficia a los vendedores de uno y otro mercado.

Otro tanto ocurre con productos que son objetos de distribuciones especiales, con precios diferenciados, como artículos de canastilla, cumpleaños, bodas, estímulos, gratuidades, etc.Todo precio diferenciado es un estimulo para las ventas ilícitas.

5. Personas que hacen viajes al exterior, sean ciudadanos cubanos o residentes extranjeros, ofertan productos de precios muy altos en el mercado nacional, de difícil acceso o simplemente inexistentes.

6. Otra fuente muy importante es lo que se distribuye a todos los organismos para el consumo  social,  como comedores  obreros y escolares. Raúl Castro  en su discurso resumen en la Asamblea Nacional del Poder Popular,  en julio de 2008, se dio por enterado de los inventarios  exagerados que existían en escuelas, y otros centros de trabajo  que excedían en meses y hasta en años, la cobertura de 45 días  autorizada (Granma 12.07.08 ); pero no se refirió a las coberturas de más de un mes de la red de comercio interior, ni los recursos que se guardan a  todos  los niveles  del país, hasta llegar al sacrosanto Instituto Nacional de Recursos Estatales (INRE), posibles fuentes todos  ellos  del mercado informal, que de otro modo correrían el riesgo de podrirse en los almacenes.

7. La actividad clandestina industrial y artesanal, de la cual se pudo observar una muestra de su alcance al darse a conocer desde el mes de mayo de 2008, los operativos y redadas  policiales que se estaban realizando contra ella. El variado surtido, no enumerado  exhaustivamente, que incluía más de 50 renglones, hizo escribir al periodista Enrique Valdés, del periódico Tribuna de la Habana, que cubría una de esas noticias: “Mientras  observaba la cantidad y variedad  de lo producido en las fabricas  clandestinas, pensé cuanto ayudaría a la población de cada territorio  además de impedir la fuga de recursos, pusiera sus desechos en función del desarrollo de la industria local”.  “…es perentorio llenar los espacios hasta ahora ocupados por esas producciones ilegales:” Solo  cabria agregar, que como esos espacios  no se han ocupado, es la población la más perjudicada por esas redadas.

Las redadas en la capital pueden dar ideas del alcance de la actividad clandestina en el país. Las principales noticias están incluidas en las ediciones de Granma 09.05, 08; 10.06.08 y 17.06.08; Tribuna de La Habana 11.05.08;  08.06.08; 06.07.08  y 30.11.08; Trabajadores 06. 10. 08;  06.10.08 y 24.11.08.  En particular se destaca la información de Tribuna de La Habana  06.07.08   que da cuenta de los operativos en San Francisco de Paula, Luyanó  y San Miguel del Padrón, donde se desactivaron 29 casas-almacenes, 12  fábricas de plásticos, 2 fábricas  de muebles de hierros, una fabrica  de muebles de madera, una fabrica de producción de aluminio, talleres y otros. En toda la provincia hasta noviembre (Tribuna de La Habana 30.11.08) se habrían desactivado más de 200 casas almacenes, más de 60 talleres ilegales  y más de 100 fabricas clandestinas y las informaciones han enumerado una larga lista de materias primas, producciones terminadas y maquinarias, todos decomisados  y los ciudadanos procesados por receptación, especulación y acaparamiento, apropiación indebida, hurto y actividad económica ilícita.

Desde marzo de 1968, cuando 40 años atrás se desarrolló la llamada ofensiva revolucionaria, en la que se expropiaron 58 000 negocios y se liquidó  toda actividad privada en el país, no se había efectuado  redada semejante, solo esta es comparable -desde el punto de vista policial- con la detención de más de 20 000 personas en abril de 1961, cuando los sucesos de Playa Girón.

8. La matanza de ganado mayor, que se justifica  porque el Estado mantiene una masa vacuna en su mayor parte improductiva, es una fuente importante  de la bolsa negra y de la alimentación de la población.

Actualmente, el Estado sólo oferta carne de res en algunas Tiendas de Recaudación de Divisas (TRD). Todos en Cuba saben que en el país está prohibida la matanza de reses de forma privada, incluso por sus dueños, y cuando algún propietario  es objeto de un robo es, además, multado y sancionado por ello. No obstante, la matanza ilegal alcanza grandes proporciones y quien haya estado en una cárcel  en Cuba, sobre todo en el interior del país, conoce de la alta proporción de sancionados por el delito de hurto y sacrificio ilegal de ganado. La inmensa mayoría de los jóvenes, y no tan jóvenes, cubanos, solo han probado comer carne de res de procedencia ilegal.

9. Otra fuente importante la constituyen las normas de consumo, de rendimiento, de mermas, pérdidas, etc., en fábricas, talleres centros de elaboración, almacenes y establecimientos en general, que debido a su arbitrariedad  y holgura, brindan una ocasión indetectable de sustracción.

La vastedad  de la Economía Informal la conocen en Cuba  hasta los novatos, es uno de los pilares de la Economía  Nacional, aunque el régimen trate de desconocerlo, y es además una válvula de escape de las tensiones que provocan  las habituales  escaseces a que conduce un régimen económico tan rígido e ineficaz como el cubano. Por ello, la desaforada represión de 2008 ha agudizado el deterioro del nivel de vida,  ya  lesionado por los huracanes, los problemas estructurales  ya tradicionales y la más reciente repercusión de la crisis económica internacional.

La Economía Informal está presente en casi todos los sectores y ramas. En la industria actúa especialmente en la alimentaria, pesquera, bebidas y tabacos, confecciones, calzado, gráfica, de materiales de construcción, artesanal y local, y en otros sectores como el agropecuario, transporte, informática y comunicaciones, servicios de alojamiento, los más variados servicios a la población educación, salud pública; y muy destacadamente  en el comercio y la gastronomía. Su esfera fundamental son los medíos de consumo y todo lo que tiene que ver con el bienestar de las personas.

Este  tipo de economía puede formar parte  del nivel de actividad de la economía oficial cuando la producción, distribución o comercialización de sus producciones se realiza de forma solapada mediante la red estatal; en las empresas, mercados agropecuarios, centros comerciales y gastronómicos o en las TRD, o  puede ser una adición  no declarada al PIB cuando las fabricas, talleres y servicios clandestinos actúen independientemente y su realización se efectúa mediante el comercio clandestino o bolsa negra, que puede ser mayorista y minorista.

No existen informaciones que permitan calcular con cierto detalle su volumen cuantitativo, pero se puede aventurar, que dada la dependencia que la población presenta de la misma y el intenso tráfico ilegal de mercancía y servicios, que es notorio; que pudiera sumar no menos de un 10%  al PIB a precios corrientes y constituir más  de una quinta parte del Producto Interno Bruto  así calculado.  Ello significaría unos 14 000 millones de pesos en total y unos 1 245 pesos por  cápita al año. Un  estudio más documentado debe arrojar cifras más elevadas. La represión de 2008 puede haber reducido la Economía  Informal en más del 50%.

Esta larga digresión sobre Economía Informal sólo tiene por fin dar a comprender el duro golpe dedo a la situación familiar en 2008  con la feroz cacería  de brujas desatada, que no se limitó  al negocio al por mayor sino también al registro en las viviendas y a los bultos de las personas en las calles con multas  y juicios, cuando poseían mercancías en una cantidad mayor a la permitida, lo cual ha provocado que las cárceles estén  repletas, con reclusos durmiendo en el suelo.

III. La situación de las finanzas externas.

“Hay una tendencia cada vez más  creciente al desbalance financiero externo”, declaró José Luis Rodríguez a los diputados de la Asamblea Nacional del Poder Popular  (Noticiero de TV 23.12.08 / 800 pm). Pero no hay que preocuparse, Raúl Castro sabe lo que hay que hacer; y declaró en la sesión de la Asamblea Nacional del Poder Popular el 27.12.08: ”… nadie, ni un individuo ni un país,  puede darse el lujo de gastar indefinidamente más de la que recibe por la venta de sus producciones o por los servicios que presta.”  “Nuestro deber  elemental es ajustar los gastos en divisas, a los volúmenes que estamos en condiciones de ingresar.” “No seria ético aumentar los gastos no productivos a costa de contraer deudas que tendrían  que pagar nuestros hijos y nietos”. Y el 31.12.08 en entrevista concedida a Talía González  recalcó: …. “seria  dejarles a nuestros hijos y nietos una gigantesca deuda; no es ético, no hay derecho.”

¿Raúl Castro pretende ignorar 50 años de desbalances comerciales adversos, en que se han estado cubriendo los déficit de Cuenta Corriente con créditos que han contribuido a crear una de las deudas per cápita más grandes del mundo? ¿Estaría bromeando?

En los últimos 50 años -salvo en1960 con 28,4 millones y 1974 con 10,6 millones de dólares de superávit- en 48 de ellos, las importaciones han sido muy superiores a las exportaciones (Anuario Estadístico de Cuba 1988 pág. 410). De 1959  a 1989 -31 años- el desbalance total a precios corrientes fue de 18 856,1 millones de dólares.  Para el periodo 1993 /1998  -6 años- se acumuló un déficit  de 10 700 millones, un promedió  de 1 783 millones por año; y para el más reciente periodo de 1999 a 2008 -10 años- se acumuló la gigantesca cifra de 46 000 millones de dólares, para un promedio de 4 600 millones por año; período que cerró 2008 con el record de 10 367 millones de déficit, año en que el déficit en Cuenta Corriente pudiera exceder los 4 000 millones de dólares.

 

En el periodo de 1900 a 1958 -59 años- solo hubo 5 años con pequeños desbalances comerciales adversos (1900 con 17,8 MMD; 1901 con 3,0 MMD; 1907 con 0,3 MMD; 1921 con 74,6 MMD  y 1958 con 38,8 MMD). En los restantes 54 años el saldo fue favorable. Quiere ello decir,  que pese a todas las deficiencias de aquella etapa, que no es necesario  desconocer, existía una República económicamente viable (Anuario Estadístico de Cuba 1988 p 410).

Por ello, lo que le dijo Raúl Castro a Talía González debió expresarlo mejo, así: “LES  HEMOS DEJADO A  NUESTROS  HIJOS Y NIETOS UNA GIGANTESCA DEUDA; NO ES ÉTICO, NO HAY DERECHO.”

Aunque el déficit  comercial se acentuó en 2008 ya desde 2005 los desbalances comerciales han estado excediendo los 5 000 MMD.

                                                          

                                                             -Millones de pesos-

             _________________________________________________________________

                                         2005              2006              2007                   2008

Exportaciones                2272             3067               3895                   3977

Importaciones               7728             9410                9975               14 344

Saldo                            (5456)           (6 333)             (6080)             (10 367)

 

Ello ha coincidido con crecimientos elevados del PIB de 11,8% en 2005; 12,5% en 2006 y 7,5% en 2007, que significa que el crecimiento solo se logra elevando las importaciones  y que sin embargo las exportaciones solo crecen a ritmos agónicos.

De los dos renglones principales de exportación, el azúcar ha pasado por los años más bajos de producción, con niveles de exportación anuales que no han llegado a las 800 mil toneladas, y en cuanto al níquel, que es un gran consumidor de petróleo, sus resultados netos siempre son bajos y en 2008, con la brusca reducción de sus precios de venta,   vio reducido sus ingresos brutos en unos  1 000 MMD.

La otra fuente importante de ingresos brutos es el turismo internacional, que requiere para su operación fuertes niveles de importaciones.

Los ingresos por servicios profesionales, en especial los médicos, se han visto disminuidos  en los dos últimos años, al reducirse la cantidad de médicos en el exterior en alrededor de 7 000, debido a la crítica situación que presentaba internamente el servicio.

Todo ello significa un elevado déficit en Cuenta Corriente, y José Luis Rodríguez declaró (Juventud Rebelde 28.12.08) que los recursos para satisfacer  las necesidades de importación y el pago de los compromisos  internacionales representaron en 2008, el 8% del PIB, es decir, unos 5 015 MMD, por lo que si se consideran  unos 800 millones de dólares por remesas familiares, significaría  un déficit por cubrir de unos 4 200 MMD, que implicaría nuevas deudas.

Las nuevas deudas no serían como dijo Raúl Castro, para los hijos y nietos, sino para los biznietos, tataranietos y choznos.

IV  La campaña contra los que no estudian ni trabajan.

El régimen siempre ha incluido entre sus  pretendidos logros el haber eliminado el desempleo. Los tradicionales bajos índices de desocupación de estos 50 años se han basado en dos soportes, uno  el exceso de personal en casi todos los centros de trabajo  y el otro,  que el nivel de desocupados se mida por la cantidad de personas que buscan empleo, dato difícilmente comprobable  en Cuba.

No preocupan los cientos de miles de personas emplantillados, cobrando sin realizar una labor útil, especie de “botelleros metamorfoseados”, que se diferencian  de los botelleros tradicionales  en que deben concurrir diariamente a un centro laboral. Sin embargo se ha emprendido una labor muy activa contra las 210 000 personas que no estudian ni trabajan (Trabajadores 29.12.08), que puede ser el preludio de una especie de nueva “Ley contra la vagancia” (Ley  1231, de marzo de 1971), que fue derogada en febrero de 1979.

En aquella época (1970) el índice de desempleo fue de solo 1,32%, con un total de 34 700 desocupados y 2 598 600 trabajadores empleados (Anuario Estadístico de Cuba 1988 pág.208). Exceptuando a estudiantes en edad  laboral, amas de casa y personas en otros quehaceres del hogar, el resto de  las personas en  edad laboral que no trabajaban, ascendían por esa fecha a 107 200, que de incluirse entre los desocupados y en la Población Económicamente Activa (PEA) hubiera elevado la tasa de desempleo  a 5,18%. Contra esas 107 200 personas actuaba la Ley Contra la Vagancia.

La campaña actual se intensificó desde diciembre  de 2007, pero se hizo más virulenta a raíz de la última sesión de la Asamblea Nacional del Poder Popular,  del 27 de diciembre de 2008. Raúl Castro, Osvaldo Martínez, Alfredo Morales  Cartaya,  Salvador Valdés Mesa, y José Luis Rodríguez, no han vacilado en calificar esas personas de sector parasitario y en pretextar una supuesta irritación de los trabajadores en contra de su existencia. En distintos escritos de una pretendida “opinión pública” que Granma publica los viernes, se les califica de zánganos, vagos, marañeros y otros calificativos similares, y se expresa que sobornan  impunemente, se enrolan en cualquier campaña turbia y que ”…le hacen el juego al mercenario  interno y al enemigo exterior” (Granma 12.01.09). De incluirse  esas 210 000 personas entre los desempleados y en la PEA, la tasa de desempleo  llegaría apenas al 5,6%.

 

Sin embargo, el ministro de Comercio Interior, Mario Murillo ha declarado (Bohemia 12.09.08, pág.32) que esa actividad pudiera funcionar con solo la mitad de sus 309 000 trabajadores, por lo que sobran en ese solo organismo unas 154 500 personas, que cobran innecesariamente y que podrían elevar la tasa de desempleo al 8, 34%.

Una de las “opiniones” publicadas en Granma afirma: “…de los que trabajamos, solo lo hacemos de manera efectiva muy parcialmente,  pues de las 8 horas laboramos 5 y las 3 restantes se dedican a resolver asuntos personales…” (Granma 16.01.09), por lo que en base a ello se pudiera calcular que sobran en el país alrededor de 1 830 000 trabajadores, lo que pudiera elevar el desempleo al 41,0% de la PEA.

Lo anterior pudiera parecer exagerado, aunque tal vez no está muy lejos de la realidad para la sociedad competitiva que será necesario  lograr tan pronto concluya este régimen ineficaz, por lo que habrá que preparar con antelación las medidas  adecuadas para solucionar el enorme nivel  de desocupación que sobrevendrá cuando ello ocurra.

Pero al régimen sólo le interesan las 210  000 personas que se escapan de su control y que no son precisamente zánganos, algo a lo que se refiere la supuesta opinión pública: “…los que no trabajan no son realmente vagos, la inmensa mayoría de ellos los encontramos haciendo marañas con los propios productos que nuestro pueblo …produce” “…,hay algunos que están en otra categoría, pero hacen el mismo daño  y son los llamados merolicos, trabajadores por cuenta propia, que desde el punto de vista legal trabajan, pero …”  (Se  da a entender  que explotan a la población ),  …“aquí están albañiles, carpinteros, plomeros, electricistas, etc.” (Granma 23.10.09).

Esto evidencia que es la actividad independiente lo que preocupa al régimen.

La elevación a 5 años la edad y los años de servicio para la jubilación, está en línea con ese propósito, ya que trata de restar personas activas que pueden desenvolverse al margen del Estado.

Esta campaña constituye el ejemplo más palpable de que al régimen no le interesa verdaderamente la economía, la eficiencia, ni el nivel de vida de la población, sino el control de la gente, para  poder perpetuar el  sistema.

V  El ciclón del 26, los huracanes de 2008, y la vivienda.

Eran las dos de la madrugada de un viernes 13 de agosto, cuando vio la luz la catástrofe más  nefasta que ha sufrido Cuba, el ciclón de 1926, que empezó a azotar el territorio nacional, con toda su fuerza destructiva el primero de enero de 1959. Y  cuando ya fenecía, otro huracán llegó, en septiembre de 2008, a completar su ruinosa obra, muy especialmente en las viviendas.

La devastación causada por los huracanes, y en especial  Ike, es ampliamente conocida y es de lamentar aún más, que la destrucción de viviendas sea mucho mayor que la que correspondería, de haberse hecho realidad esta vieja promesa:

“Hay en Cuba doscientos mil bohíos y chozas; cuatrocientos mil familias del campo y de la ciudad viven hacinados  en barracones, cuarterías, y solares…” “Un gobierno revolucionario resolvería el problema de la vivienda…” “Hay piedra suficiente y brazos de  sobra para hacerle a cada familia cubana una vivienda decorosa.”

Hace 55 años Fidel Castro hizo esa promesa en su alegato de defensa por el ataque al Cuartel Moncada, y 50 años han transcurridos desde que estuvo en capacidad de cumplirla.

Las viviendas de tipología I, de cubiertas de hormigón (placa) y paredes de mampostería son las adecuadas para resistir los huracanes (TV cubana 07.09.08/5:00 pm), sin embargo los huracanes Gustav y Ike  dañaron 530 758 viviendas (Granma  27.12.08), el 15,2% del fondo habitacional del país -casi su sexta parte- muchas de ellas con pérdidas  parciales y totales de techos y de ellas 67 000 fueron derrumbes totales (Granma 02.10.08).

Las  numerosas imágenes que brindó la televisión cubana sobre la destrucción a lo largo del país dejaron ver un predominio de ranchos de madera y casas con cubiertas ligeras, fundamentalmente de tejas de asbesto  cemento.

El predominio -casi absoluto- de las cubiertas ligeras en la destrucción de techos se demuestra debido a que: “…para devolverles las cubiertas a las viviendas afectadas por Gustav y Ike  se requieren  más de 22 millones de m2 de tejas” (Bohemia 24.10.08, pág. 31). Ello significa, que teniendo en cuenta el tamaño promedio de las casas de 70 m2 de teja, entre 270 000 y 350 000 viviendas equivalentes fueron afectadas,  los perjuicios parciales en las cubiertas, significa que casi la totalidad de los daños fueron principalmente en techos de fibras blandas.

Un ejemplo de la situación  de las cubiertas lo ofrece la provincia de Matanzas, no azotada directamente y que sufrió pocos daños,  donde hay 71 000 casas con techos ligeros (Noticiero de TV 30.09.08/1:00pm) lo cual representa un tercio de un fondo aproximado de 211 000.

Por otra parte, el 70% de las viviendas devastadas por Ike eran de madera (Noticiero de TV 27.09.08/800pm).

La poca preparación habitacional para resistir los huracanes, independientemente del tipo de vivienda, lo ofrece como ejemplo la capital, donde 172 000 viviendas se encontraban en regular y mal estado hace dos años (Tribuna de la Habana 12.03.06) lo cual representaba un tercio del total de  las 540 000 que disponía la ciudad (Trabajadores 21.02.05).

Los bohíos son aún una realidad en los campos de Cuba. Según el censo  de 2002 alcanzaban el 5,7% del fondo habitacional (Granma 26.07.07), lo que equivale a unos 200 mil, cifra similar a la que Fidel Castro denunció  en 1953. No es pues de extrañar  tamaña destrucción, cuando la situación habitacional del país no está preparada para resistir fenómenos de tal naturaleza destructiva.

Esa situación  resulta contradictoria en un país que llegó a crear capacidades para producir 5 millones de toneladas de cemento anuales y donde la industria de materiales de la construcción alcanzó altos niveles. Fabulosas cantidades de cemento, piedra, arena y demás materiales de construcción sirvieron para construir miles de kilómetros de túneles (lo cual confirmó Raúl Castro en una entrevista en Brasil –Granma 17.12.08). Así como fortificaciones, taladrar montañas, unir cayos con cientos de kilómetros de terraplenes  y edificar cientos de centros agropecuarios y otras instalaciones, muchas de las cuales nunca funcionaron. Pero en esa fiebre constructiva la vivienda no era prioritaria.

En 2005, ante la grave situación, se trazó el plan de incrementar la terminación de viviendas y lograr 100 000 anuales a partir de 2006; y 50 000 en 2005. En 2005 se terminaron  39 261, en 2006 fueron 110 000, aunque 33 000 de ellas ya estaban habitadas con anterioridad y le faltaban solo detalles para su terminación (Granma  05.08.06), en 2007 solo se concluyeron 52 607; y en 2008 se terminaron 42 000 (Juventud Rebelde 16.12.07). En total en 4 años de 2005 a 2008, de un plan inicial de 350 000 únicamente se terminaron 243 868 para un 69,68%. Si se excluyen las 33 000 ya habitadas desde años antes de 2006, las realmente concluidas fueron 210 868 para un cumplimiento del 60,25% del plan inicial.

Se hace evidente que el problema de la vivienda, no solo no se resuelve, sino que se agudiza cada vez más.

Resulta contradictorio  que con el deterioro  ya analizado del fondo habitacional, que el 51,1% de los 9 722 millones de dólares de los daños totales de los huracanes (Trabajadores 29.12.08) correspondan  a viviendas 4 966,9 millones. Para llegar a esa cifra habría que valorar las 67 000 viviendas destruidas totalmente, cuyo 70% eran de madera, con predominio de ranchos rústicos, al costo real de 65 000 pesos, correspondientes de viviendas de tipología I (Trabajadores 20.11.06), lo cual ascendería   a 4 355 millones; valorar 22 millones de m2 de tejas, que responderían a la cantidad de 11 125 158 tejas de 1,75 x 1,13 m (1,9775 m2 c/u) a los precios que se venden a la población de $11,40 cada una (Noticiero de TV 22.09.08/1:00 pm), que significaría 126,8 millones de pesos y destinar aún 485,1 millones a otros materiales y gastos.

Valorando las 67 000 viviendas totalmente destruidas al precio máximo de 8 000 pesos por una vivienda de tipología III, de techo blando, de fibra; su costo total seria de 536 millones de  pesos y el daño total en viviendas sólo ascendería a 1 147,9 millones, en lugar de 4 966,9 millones, por lo que el efecto  total de los huracanes nada más llegaría a 5 903 millones, en lugar de 9 722 millones.

No es posible enjuiciar la valoración del resto de los daños ocasionados por el huracán pero en cuanto a las viviendas no cabe duda que están  sobrevaloradas.

Se podría argumentar que la valoración se hizo teniendo en cuenta el valor de las viviendas que se harán para reponer las destruidas, pero eso es dudoso, ya que se ha divulgado -sin embargo- que en Santa  Cruz del Sur, se han estado construyendo facilidades temporales como viviendas, para reponer las casas dañadas y que a lo largo del país se está haciendo un amplío uso de las tablas de palma real para reemplazar viviendas, lo que ofrece dudas acerca de su mejoramiento.

VI  ¿EPÍLOGO? 

No puede haber epilogo porque al concluir 2008, Cuba no ha llegado a una escena final, ni tan  siquiera al final de una etapa, ni al inicio de una transición, sino a la caricatura de un cambio: de una tragedia protagonizada por un aprendiz de César, igual que aquel, ambicioso y mesiánico, inescrupuloso, aunque no exento de talento; a una farsa donde pasó a primer plano un émulo de Tartufo, cínico, hipócrita y simulador. No hay Cambio, es como otro cantante para la misma orquesta.